Qué es Mobbing

El acoso laboral, también conocido por su anglicismo mobbing, hace referencia tanto a la acción de un hostigador u hostigadores conducente a producir miedo, terror, desprecio o desánimo en el trabajador afectado hacia su trabajo, ​ como el efecto o la enfermedad que produce en el trabajador. Wikipedia

En general, el acoso se produce desde una posición de mayor jerarquía a una de menor, aprovechando la ventaja que le da su posición dentro de la organización o de privilegio, por lo que también se puede producir entre compañeros o por subalternos.

Este acoso se puede producir a lo largo de un tiempo prolongado, meses e incluso años, en forma recurrente y sistemática. Como sea, esto produce desgaste laboral y emocional en el que recibe el acoso.

Las acciones y las repercusiones se asimilan al bullying o acoso escolar, pero a diferencia de que este incluye maltrato físico.

Las acciones pueden llegar a considerar manifestaciones de conductas abusivas, mal comportamientos, amedrentamiento, palabras, actos deliberados, gestos, incluso mensajes que puedan afectar al afectado desde el punto de vista e integridad física, psíquica y moral, tanto de él, así cómo de la organización.

El mobbing, de no ser controlado, puede terminar en una enfermedad profesional o de trabajo, aunque es muy difícil de demostrar ante las entidades y autoridades responsables.

 

Cómo se desarrolla el Mobbing en la Empresa

Deficiencias en la distribución de los recursos de la empresa, tanto físicos como humanos, puede dar inicio a diferencias, atentar contra el bienestar físico, psíquico y social de los trabajadores.

Las relaciones interpersonales son tan importantes dentro de la organización, que pueden ser factores adicionales, que pueden ser componentes tan importantes o más que los anteriores en el acoso.

Las relaciones con la jefatura y los objetivos de la empresa también pueden afectar, incrementando el estrés laboral, percibiendo como acciones agresivas cualquier instrucción que de ellos provienen.

 

Consecuencias a Corto, Mediano y a Largo Plazo

Disminución de la capacidad laboral, ausentismo, falta de lealtad, pérdida de competitividad de la empresa, deterioro de la vida familiar, baja autoestima, conflictos recurrentes, mentiras en el trabajo, prejuicios, y así.

Dependiendo del tipo de organización, esto puede afectar a propietarios y clientes, o al público en general y al país en su todo.

Queda claro que las consecuencias a corto plazo pueden pasar de ser solo un mal rato, a mediano plazo, pérdida de competitividad y de clientela, y a largo plazo, quiebra o pérdida de credibilidad.

 

Riesgos de este tipo de Conductas

Mayor accidentalidad, errores, trabajo defectuoso, mal trato, pérdidas de oportunidades, ausentismo laboral, pago de gastos médicos y licencias, alza de tasas de accidentabilidad.

El mayor riesgo es que esta situación pase de solo de afectar a un par de recursos de la organización a un grupo de ellos, tanto como a un área, departamento, división.

 

Riesgos de ocultar estas Conductas

El ocultar estas situaciones, demuestra el primer obstáculo para solucionar estas situaciones.

Las consecuencias podrían afectar sólo al afectado con todas las posibles consecuencias conocidas.

Las consecuencias podrían dar origen a nuevas situaciones indeseadas, con nuevos recursos o personal.

 

Riesgos de no considerar estas Conductas

El no reconocer, desestimar o no tomar en cuenta las denuncias, demuestra el segundo obstáculo para solucionar estas situaciones.

La principal responsabilidad pasa por la jefatura que debe ser capaz de detectar estas situaciones.

También es de responsabilidad del área a cargo de asesorar al equipo directivo, ya que debe disponer de habilidades más desarrolladas que las jefaturas en este ámbito.

 

Acciones para evitar el Mobbing

Mejorar la distribución de los recursos humanos y técnicos es el primer paso. No favorecer a nadie en desmedro de otro. Un escritorio, una silla, una ventana, la luz en el puesto de trabajo, así una innumerable lista de factores.

El coaching es una herramienta o técnica de las mejores para evitar estas situaciones.

Reconocer las emociones propias, las emociones de los otros, cómo gestionarlas y manejarlas.

Reconocer lo que son las afirmaciones, los juicios y las explicaciones y cómo nos pueden afectar.

Reconocer los perfiles y estilos sociales nuestros y los de los otros y cómo relacionarnos con ellos, cómo premiarlos o cómo corregirlos, cómo darles las instrucciones, como darles feedback.

Mejorar la Escucha Activa, tanto la nuestra cómo la de los que nos rodean.

Aprender a gestionar el tiempo, planificar, definir nuestras metas y objetivos, reconocer las metas y objetivos de la jefatura, y la de la organización.

Mejorar nuestra conversación, aprender a transformarnos, logrando poder adaptarse de mejor forma al medio, poder relacionarnos de mejor forma con nuestros proveedores y principalmente con nuestros clientes.

Reconocer nuestra capacidad neurolingüística y la de nuestros interlocutores, nuestro lenguaje, nuestras emociones, nuestra corporalidad y cómo nos afecta, al uno y al otro.

Nuestro objetivo será entonces cambiar la cultura organizacional en por de una mejor vida laboral, social y familiar, tanto individual, colectivo, o empresarial.

 

Es ahora o nunca.